martes, 30 de noviembre de 2010

Respiren: Cataluña vuelve a ser catalana (y de derechas)


Respecto a las elecciones catalanas existe una especie de unanimidad subliminal, tanto a derecha como a izquierda, de que ha ganado quien debía ganar, porque es lógico que en Cataluña manden los catalanes, ¿no? Y es que a  Convergència i Unió, en las Españas de más allà de la Franja de Ponent, la llaman “los catalanes”, lo que les debe encantar a los de CiU. De hecho Convergència, más que un partido político, es una organización fundada para, y destinada a, administrar el poder en Cataluña, no a defender una determinada postura ideológica: eso se lo deja a Unió, su socio de coalición, un partido demócrata cristiano de sesgo nacionalista y conservador. Pero Convergència es otra cosa. Puede llamársela nacionalista, puede llamársela populista, puede llamársela conservadora, y todas esas cosas es, sin duda. Pero su objetivo no es ocupar el poder para llevar adelante un proyecto político. Es al revés, el objetivo de su proyecto político es ocupar el poder, en todas sus facetas y variantes. Más que ocuparlo, ser el poder.